Si estás planeando una visita a la hermosa ciudad de Sevilla, estás en el lugar correcto. En este artículo, te daremos una completa guía de todo lo que puedes hacer y ver en Sevilla, una zona llena de historia, cultura y tradición. Desde monumentos emblemáticos hasta espectáculos flamencos, Sevilla tiene algo para todos los gustos. ¡Prepárate para sumergirte en la magia de esta ciudad!.
Qué hacer y ver en Sevilla
Dice la canción que «Sevilla tiene un color especial», pero lo cierto es que no sólo tiene un color, sino todo un arcoíris. Cada rincón de la ciudad tiene una personalidad distinta y cada calle esconde alguna sorpresa. Pero hay espacios que no debes de perderte bajo ningún concepto en tu visita a la capital hispalense.
Las visitas obligadas de esta soleada ciudad son el Real Alcázar, la Plaza de España y la Catedral de Sevilla. También te recomendamos asistir a un espectáculo de flamenco y darte un festín de tapas. A continuación, te presentamos con detalle todos los planes para saber qué hacer y ver en Sevilla.
1. Catedral de Sevilla
La Catedral de Sevilla, uno de los monumentos góticos más impresionantes a nivel mundial, se alza imponente en el corazón de la ciudad. Su fachada es simplemente hermosa y merece la pena ser contemplada por su belleza inigualable. Esta majestuosa construcción, llena de pórticos y con un interior suntuoso, fue construida en el lugar donde se encontraba una antigua mezquita almohade en el año 1401.
A pesar de la magnitud de la obra, la construcción se prolongó por más de cien años. No puedes perderte la Capilla Mayor, la impresionante colección de joyas y pinturas, ni la tumba de Cristóbal Colón. No es de extrañar que haya sido declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. ¡Descubre la historia y la belleza de la Catedral de Sevilla!
2. La Giralda
La torre de la Giralda, junto a la Catedral de Sevilla, se eleva 104 metros sobre la ciudad. En sus inicios, fue el minarete de la mezquita árabe que ocupaba el mismo lugar. A lo largo de los siglos, la Giralda ha sufrido diversas transformaciones, especialmente durante la transición de la ciudad de árabe a cristiana. La adición de la sección superior con 24 campanas la convierte en el campanario con más campanas de España. Desde lo alto de la torre, se pueden disfrutar de unas vistas impresionantes de la ciudad. En la cima se encuentra el famoso «Giraldillo», una veleta de más de tres metros que simboliza la victoria del cristianismo sobre el islam. Ubicada en la Avenida de la Constitución, s/n. ¡No te pierdas esta maravilla arquitectónica!
3. Explora el Real Alcázar de Sevilla
Justo al lado de la Catedral, encontrarás el Real Alcázar, un palacio de ensueño que combina diferentes estilos arquitectónicos y que te transportará a otra época. ¡No olvides dar un paseo por sus exuberantes jardines!.
4. Plaza de España de Sevilla
La Plaza de España de Sevilla, construida en 1928 en conmemoración del Descubrimiento de América durante la Exposición Iberoamericana de 1929, destaca por su forma circular y sus canales navegables.
Este icónico espacio público cuenta con cuatro puentes que representan los antiguos reinos de España, arcadas, fuentes y 48 bancos que simbolizan las provincias españolas.
Además, la Plaza de España ha sido escenario de numerosas series y películas, como ‘La guerra de las galaxias’, y sus azulejos decorativos son reconocidos a nivel mundial.
5. El parque de María Luisa de Sevilla
El Parque de María Luisa, situado frente a la Plaza de España, es el pulmón verde más destacado de Sevilla. Ha sido reconocido como Bien de Interés Cultural en la categoría de Jardín Histórico y fue inaugurado en 1914 como parte de los jardines privados del palacio de San Telmo. La infanta María Luisa Fernanda donó estos jardines a la ciudad, que hoy en día disfruta de sus encantadoras fuentes, como las de las Ranas, la de los Leones y la Isleta de los Patos. En su interior, se encuentran el Museo Arqueológico de Sevilla y el Museo de Artes y Tradiciones Populares. Un lugar imprescindible para visitar en la capital andaluza.
6. Torre del Oro
La Torre del Oro, conocida como la «niña bonita de Sevilla», se encuentra en la orilla del río Guadalquivir y fue construida en el siglo XIII como parte de las defensas militares de la ciudad. Durante la época árabe, se utilizaba para controlar el tráfico de barcos mediante una enorme cadena que la conectaba con otra torre al otro lado del río.
En la actualidad, la Torre del Oro alberga el Museo Naval, donde se exhiben maquetas y herramientas antiguas de navegación. Desde lo alto de la torre, se puede disfrutar de una impresionante vista del barrio de Triana, la Catedral y el río Guadalquivir. No te pierdas la oportunidad de visitar este emblemático monumento en el Paseo de Cristóbal Colón, s/n. ¡Descubre la historia y la belleza de la Torre del Oro en Sevilla!
7. Barrio de Santa Cruz
El Barrio de Santa Cruz en Sevilla es uno de los lugares más emblemáticos y pintorescos de la ciudad, y sin duda, un destino que no te puedes perder si visitas la capital andaluza. Con sus estrechas calles empedradas, patios llenos de flores y la magia que se respira en cada rincón, este barrio histórico te transportará a otra época y te dejará maravillado con su encanto único.
Tiene sus raíces en la antigua judería de Sevilla, cuando los judíos sefardíes vivían en esta zona durante la Edad Media. Tras la expulsión de los judíos en el siglo XV, el barrio pasó a ser habitado por la nobleza y la clase alta de la ciudad. Sin embargo, con el paso del tiempo, el barrio fue perdiendo su esplendor y se convirtió en uno de los barrios más pobres de la ciudad.
Una de las principales atracciones del Barrio de Santa Cruz es su arquitectura única, con influencias árabes y mudéjares que se reflejan en sus calles estrechas y laberínticas, casas encaladas y patios repletos de flores y azulejos.
8. Metropol Parasol
El Metropol Parasol, también conocido como Las Setas, es un peculiar mirador construido en 2011. Su arquitectura vanguardista simula seis grandes setas o paraguas, con una estructura de madera que contrasta con el estilo tradicional andaluz, aportando originalidad y modernismo a la ciudad. Desde la parte superior del edificio, se pueden disfrutar de vistas panorámicas de 360 grados. Situado en la Plaza de la Encarnación, s/n.
9. Isla de la Cartuja
Aunque su apariencia no corresponde con la de una isla, este lugar situado a orillas del río Guadalquivir fue el lugar donde se celebró la Exposición Universal de 1992, y aún conserva algunos de los pabellones construidos para dicha ocasión. A través de una pasarela de madera se puede acceder al Jardín Americano, un jardín botánico exótico que alberga más de 300 especies originarias del continente americano.
En la Isla de la Cartuja se encuentra el monasterio de la Cartuja o monasterio de Santa María de las Cuevas, que data del siglo XV y que actualmente alberga el Centro Andaluz de Arte Contemporáneo. También en este lugar se hallan Isla Mágica, un parque de atracciones temático, y Agua Mágica, un parque acuático. Ambos son destinos ideales para disfrutar de Sevilla en familia.
10. Basílica de la Macarena
La Basílica de la Macarena, conocida oficialmente como Basílica de Santa María de la Esperanza Macarena, se encuentra en la calle Bécquer del barrio de La Macarena en Sevilla. Es el lugar donde tiene lugar la procesión de la hermandad de La Esperanza Macarena durante la madrugada del Viernes Santo, con las imágenes de la virgen titular del templo y Nuestro Padre Jesús de la Sentencia. Fue construida en 1941 y bendecida en 1949 para albergar estas imágenes, que anteriormente estaban en la capilla de la Parroquia de San Gil, incendiada en 1936.
El arquitecto a cargo de la obra fue Aurelio Gómez Millán, quien diseñó un edificio de estilo barroco con una sola nave, bóveda de cañón y cuatro capillas laterales. En 1966, el papa Pablo VI le otorgó el título de basílica menor. Su fachada es majestuosa, con una puerta de acceso sostenida por columnas de mármol. En su interior, destacan la decoración marmórea y las pinturas al fresco de Rafael Rodríguez centradas en la virgen madre.
Los retablos dorados de madera en el presbiterio y capillas laterales, elaborados en el taller de Juan Pérez Calvo, son otra de sus características encantadoras. El retablo Mayor alberga a la Santísima Virgen de la Esperanza en un camarín hecho por Fernando Marmolejo Camargo. Las capillas laterales están dedicadas a Nuestro Padre Jesús de la Sentencia, la Virgen del Santo Rosario, Cristo de la Salvación y las Patronas de Hispanoamérica.
11. Palacio de Dueñas
El Palacio de Dueñas es un lugar imprescindible para conocer la arquitectura típica andaluza y disfrutar del lujo que lo ha rodeado a lo largo de los siglos. En este palacete han residido o visitado, en el siglo XX, personalidades tan destacadas como la emperatriz Eugenia de Montijo, Alfonso XIII, Jacqueline Kennedy, Grace Kelly, Rainiero de Mónaco, Eduardo VIII, Jorge VI y el político inglés Lord Holland. Sin olvidar a Antonio Machado, quien vivió allí durante ocho años en el siglo XIX, ya que su padre era el administrador de la propiedad.
Los orígenes de este palacio se remontan a los siglos XV o XVI, tomando su nombre de un monasterio cercano ya desaparecido. La casa palacio originalmente pertenecía a la familia Pineda, señores de Casa Bermeja, uno de los linajes más destacados de Sevilla. Posteriormente, pasó como herencia a Fernando Enríquez de Ribera, II marqués de Villanueva del Río y padre de Antonia Enríquez de Ribera, quien se casó en 1612 con Fernando Álvarez de Toledo, futuro VI duque de Alba. La historia de estos apellidos explica por qué en la actualidad el palacio pertenece a la Casa de Alba.
12. Casa de los Pilatos
Conocida como casa de Alcalá de los Gazules, este impresionante palacio se encuentra en el número 1 de la plaza de Pilatos. Su origen se remonta al siglo XV, fruto de la unión de los linajes Enríquez y Ribera, quienes mantenían estrechos lazos con Italia y mostraban una gran pasión por el arte renacentista. El verdadero impulsor de la Casa y del ascenso social de la familia fue Per Afan de Ribera “el Viejo”.
A mediados del siglo XIX, el Palacio de los Adelantados Mayores de Andalucía, como se conoce popularmente, sufrió una extensa remodelación que incorporó elementos y formas propias del Romanticismo. No te puedes perder los magníficos artesonados y la colección de escultura clásica del I Duque de Alcalá.
13. Fábrica de Tabacos de Sevilla
Este icónico edificio que rememora la famosa historia de la cigarrera Carmen de la ópera de Bizet fue erigido en el siglo XVIII para albergar la primera fábrica de tabacos en Europa. A partir de mediados del siglo XX, ha sido ocupado por el rectorado de la Universidad de Sevilla y varias facultades.
Situada en las cercanías de la Puerta de Jerez y el Convento de San Diego, la Real Fábrica de Tabacos de Sevilla presenta una estructura rectangular y es considerada el edificio industrial más destacado de España del siglo XVIII, solo superado en tamaño por el Monasterio de El Escorial.
Incluso, Richard Ford la describió como el Escorial del tabaco durante su visita a Sevilla. El complejo está rodeado por un foso en tres de sus lados, aislándolo del exterior, y en su fachada principal se aprecia la influencia del estilo barroco. Destaca una entrada con columnas gemelas a cada lado y una estatua de la Fama en la parte superior. Desde 1959, ha sido declarada Bien de Interés Cultural con la categoría de Monumento Histórico.
14. Palacio de la Condesa de Lebrija
El Palacio de la Condesa de Lebrija, ubicado en la concurrida calle Cuna, es uno de los edificios más hermosos para visitar en Sevilla. Construido en el siglo XVI, este palacio cuenta con una fachada de estilo andaluz que cautiva a todos los que lo visitan. Fue en 1901 cuando la condesa de Lebrija llevó a cabo una importante reforma en el palacio, convirtiéndolo en un lugar lleno de encanto donde albergó su impresionante colección de antigüedades. Destacan sus increíbles mosaicos romanos, que decoran la planta baja y añaden un toque de historia y belleza a este lugar único.
Actuaciones de flamenco: un imprescindible en Sevilla
Las actuaciones de flamenco en Sevilla se distinguen por su autenticidad y su conexión con la historia y la cultura de la ciudad. Visita la cuna del flamenco en Triana, donde disfrutarás de una experiencia inolvidable.
El flamenco se caracteriza por la diversidad de sus estilos, conocidos como «palos». Cada palo tiene su propio ritmo, melodía y letras, lo que lo hace único y emocionante. En Sevilla, podrás disfrutar de una amplia variedad de palos, desde la alegría de las bulerías hasta la melancolía de las soleás.
Si quieres vivir una experiencia auténtica de flamenco en Sevilla, no puedes perderte los tablaos flamencos de la ciudad. Estos locales íntimos y acogedores te permitirán disfrutar de espectáculos de primer nivel, con bailaores, cantaores y guitarristas de renombre que te harán vibrar con su arte.